El éxito de cualquier empresa se sustenta en su talento humano, el cual es el elemento crucial para el adecuado funcionamiento de la organización. Las personas que forman parte de una empresa desempeñan diversas funciones vitales, como si fueran los órganos de un organismo vivo. Al igual que cualquier órgano necesita nutrientes para fortalecerse y resistir, cada colaborador de una empresa necesita ser capacitado y entrenado adecuadamente para nutrir su desarrollo y crecimiento profesional. En este sentido, una buena capacitación y entrenamiento se convierten en los nutrientes que alimentan y fortalecen a cada individuo, permitiéndoles desempeñar sus funciones de manera efectiva y contribuir al éxito de la empresa.
Las franquicias no son ajenas a lo anteriormente mencionado, es por ello que el día de hoy hablaremos de la importancia y desarrollo de manuales y programas que permitan llevar a cabo una buena preparación para operar bajo un modelo de negocios ofrecido por un franquiciatario.
Los programas y manuales de entrenamiento y capacitación para franquiciados bien planeados y ejecutados garantizan que se cumplan los estándares y las normas de la marca, lo que a su vez ayuda a mantener la calidad de los productos y servicios ofrecidos por la empresa. Es importante que se tome en cuenta cada uno de los aspectos y lineamientos que se manejan dentro del modelo de negocios de una franquicia, ya que este es el resultado de esfuerzos de años que han garantizado su efectividad.
A continuación, te presentamos algunos consejos para desarrollar manuales y programas de entrenamiento efectivos para los franquiciados:
Familiarización con los franquiciados: es importante conocer y estudiar a las personas con las que se tiene en mente hacer el trato. Saber cuáles son los objetivos, aspiraciones, trasfondo y experiencia profesional/laboral de los posibles franquiciados que se encuentren interesados en el modelo de negocios de una franquicia; esto permitirá entablar mejores relaciones laborales y facilitaran la comunicación y recolección de información para comenzar a plantear la creación de un manual o programa de entrenamiento adecuado.
Identificar las necesidades de capacitación: una vez que se haya familiarizado con los franquiciados, el primer paso para diseñar un programa de capacitación efectivo es identificar las áreas en las que necesitan mejorar. Esto puede involucrar aspectos específicos como la atención al cliente, la preparación de alimentos, la gestión financiera, entre otros. Con esta información en mente, es posible desarrollar un manual personalizado que aborde las necesidades específicas de la franquicia.
Elaborar un diagnóstico y establecer objetivos: después identificar las necesidades de los franquiciados, se debe elaborar un diagnóstico que permita trazar la dirección de los esfuerzos de la empresa y cómo esta puede darle resolución a estas áreas de oportunidad. Esto dará paso al planteamiento de objetivos que deben ser medibles y alcanzables, para así priorizar el éxito deseado.
Crear manuales detallados: tras llevar a cabo todas las acciones previas, es fundamental plasmar toda la información recopilada en un manual que resulte fácil de comprender para los franquiciados. Estos deben abarcar diversos aspectos clave de la franquicia, como la historia de la marca, los productos y servicios disponibles, los procedimientos operativos estándar (SOP), entre otros datos relevantes.
Es vital que estos materiales se actualicen regularmente para mantenerse al día con los cambios que se produzcan tanto dentro de la empresa como en la industria en general.
Incluir capacitación práctica: la práctica es fundamental para garantizar que comprendan cómo implementar los procedimientos operativos estándar en situaciones reales, además de que les permite hacer preguntas y recibir retroalimentación en tiempo real.
Establecer métricas de desempeño: es vital establecer métricas de desempeño para medir el éxito del programa de entrenamiento -se puede incluir la tasa de retención de empleados, la satisfacción del cliente y las ventas-. Al establecer medidas de desempeño claras, se puede evaluar si los franquiciados están cumpliendo con los estándares y las normas de la marca.
Ofrecer entrenamiento continuo: la capacitación para nada debe ser un evento único, pues es importante mantener un entrenamiento continuo para que los franquiciados puedan estar actualizados y aptos para hacerle frente a los cambios en la empresa y la industria.
Sin duda alguna, los manuales y programas de entrenamiento son un elemento fundamental para proteger los estándares y normas de las franquicias. Es de suma importancia mantener bien capacitados a los franquiciados para que los objetivos tanto de ellos como de la empresa sean alcanzados con éxito.
